Esta trilogía tiene como protagonista a Becca, como bien indica el título. Ella es una psicóloga especialista en fobias, que trabaja en Gran Hermano como apoyo de los concursantes. Aunque es un programa que a mí, personalmente, no me gusta nada, la protagonista se lo toma muy en serio, intentando ayudar a sus concursantes asignados con todo lo que tiene, para lo cual, utiliza métodos no muy tradicionales. Estos métodos nada tradicionales hace que reciba del Súper una oferta que no puede rechazar.
Y es que Fede, el Súper, le ofrece su propio programa, algo que a ella no se le había pasado nunca por la cabeza. Este programa es El diván de Becca, con el cual puede ayudar a personas con fobias particulares por todo el territorio español. Ella tiene sus dudas, porque es un paso muy importante para su carrera profesional, así que llama a su novio David, que se encuentra en EEUU para pedir su consejo. Pero él, en vez de apoyarla, la hunde en la miseria, diciéndole que lo que tienen ahora ya no es lo mismo que lo que tenían antes, y que la distancia no ayuda nada. Así que la deja por FaceTime. (Un auténtico cobarde y un mierda, si queréis mi opinión).
Así que para poder salir adelante con el hoyo en el que se ha metido sentimentalmente hablando, decide aceptar la propuesta de su jefe. Para poderlo llevar a cabo El diván de Becca, le colocan un equipo, en el cual se encuentra Axel. Un moreno gigante salido de las entrañas del infierno que ha aparecido para dejar su vida vuelta del revés con una sola mirada de sus verdes ojos. Se caen mal desde el principio, pero eso no evita que la curiosidad por intentar descifrarlo pueda con ella. Sin embargo, es más difícil que darle una pastilla a un gato.
A eso se suma el que, con su reciente fama, aparecen algunas personas un poco locas. Ella no lo toma en serio, pensando que solo les quieren hacer bromas, porque ella no se lleva mal con nadie, ni le ha hecho nada a nadie para que le quieran hacer daño. Pero Axel no piensa así, así que se ve obligado a erigirse como su guardaespaldas. ¿Tendrá él razón, y Becca estará en peligro? ¿O será solo una sobreprotección totalmente fuera de lugar de una persona extremadamente controladora y obsesiva?
Espero que os guste esta historia y os enganche tanto como lo ha hecho conmigo.
El diván de Becca (Lena Valenti)
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